Recetas de albóndigas de pollo picantes

Estas albóndigas de pollo picantes son una tapa perfecta para destacar. Una simple pechuga de pollo se puede convertir en un plato de restaurante. Esta carne blanca sin casi nada de grasa y muchas proteínas es un básico para poder ponerse en forma o estar a dieta. El sabor de este ingrediente saludable estará realmente potenciado por el toque picante que marcará la diferencia. El picante potenciará sus propiedades beneficiosas y le dará un toque perfecto para una cena romántica o especia. Atrévete a probar unas albóndigas de pollo picantes preparadas para triunfar en unos minutos.

Ingredientes:

Cómo preparar unas albóndigas de pollo picantes

1. Esta receta es muy fácil de preparar, simplemente necesitamos buscar una buena materia prima para conseguir un resultado espectacular.
2. Con la pechuga de pollo, simplemente la lavamos bien y la picamos para que se convierta en la base de estas albóndigas deliciosas.
3. Pelamos el ajo y lo cortamos en trocitos del mismo tamaño. Mezclamos el ajo con la carne de pollo. Salpimentamos al gusto.
4. Mezclamos la rebanada de pan de molde con un poco de leche. Les dará un interior cremoso a nuestras albóndigas caseras de pollo picantes.
5. Incorporamos unas gotas de tabasco y el perejil picado amasamos bien hasta tener casi listas las albóndigas.
6. Cortamos en trocitos el perejil y lo ponemos en esta mezcla conseguiremos de esta manera un toque de color.
7. Salpimentamos al gusto. Podemos dejar que los ingredientes maceren un poco, dejarlas listas la noche anterior y darle forma a la mañana siguiente.
8. Tal como están las albóndigas ya listas las podemos congelar y tener siempre preparadas para cualquier ocasión.
9. Freímos con un poco de aceite durante unos minutos. Incorporamos la salsa de tomate para darles más color.
10. Tendremos listas unas albóndigas de restaurante fáciles de preparar. Solo nos quedará probarlas y disfrutarlas.

Salsa de tomate casera

Para acompañar esta receta nada mejor que una salsa de tomate casera. La podemos congelar fácilmente para poder disfrutarla en cualquier momento. Las albóndigas se podrán preparar al mismo tiempo que esta salsa casera.

Ingredientes:

• 2 kg de tomates pera
• 1 cebolla
• 2 dientes de ajo
• 1 pimiento rojo
• 1 pimiento verde italiano
• 1 poquito de orégano
• 1 poquito de perejil fresco
• 1 cucharada de azúcar blanco
• ½ cucharada de sal
• ½ cucharadita de pimienta negra molida
• Aceite de oliva

Elaboración:

1. Escaldamos los tomates en agua hirviendo. Les haremos una cruz y los pondremos en el agua unos segundos. Pelamos y troceamos.
2. Seguimos con la cebolla, la pelaremos y picaremos muy fina para que se convierta en el fondo de la salsa.
3. Lavamos los pimientos y los cortamos en trocitos que colocamos con la cebolla. Repetiremos la operación con los ajos.
4. En una olla ponemos aceite en cantidad, le incorporamos la cebolla, el pimiento y el ajo. Removemos un poco antes de ponerle el azúcar y la sal.
5. Cuando estén estos ingredientes blanditos le pondremos los tomates. Rectificaremos de sal y pimienta, son un ingrediente que suele aportar un dulzor especial.
6. En ese momento le ponemos también la pimienta, el orégano y el perejil. Dejaremos que se cocinen a fuego lento durante una hora aproximadamente.
7. Cuando esté lista la salsa la trituramos con la batidora directamente en la olla.